viernes, 26 de noviembre de 2010

tan siquiera me recuerda

y para qué me sirve recordar nuestro primer beso, si tan siquiera ella me recuerda,
nada,
ya me olvidó.
Yo le entregué mi alma,
mi todo
y ella solo me abandonó.
Yo les puedo afirmar cada lunar en su cuello y hasta el cambio de color en sus ojos dependiendo del tiempo.
y ella tan siquiera me recuerda, nada,
ya me olvidó.
Me partió el corazón en sus propios ojos y ella tan siquiera lo notó,
y yo que todavía aquí estoy, llorándola, despedazada
y ella tan siquiera me recuerda,
nada,
ya me olvidó.